El conseller de Benestar Social y Família, Josep Lluís Cleries se reunirá con la alcaldesa próximamente para consensuar el plan transversal
Vida | 22/01/2011 - 04:14h
BARCELONA. (EUROPA PRESS) La Generalitat y el Ayuntamiento de Salt (Girona) empezarán a aplicar este trimestre un plan de medidas de choque en el municipio, salpicado por recientes episodios de violencia, ha revelado el conseller de Benestar Social y Família del Govern, Josep Lluís Cleries.
En una entrevista a Europa Press, el conseller ha revelado que su encuentro con la alcaldesa de Salt, Iolanda Pineda, para consensuar el plan transversal de actuaciones, se producirá la próxima semana o a principios de la siguiente con el objetivo de fijar objetivos a corto, medio y largo plazo.
Las medidas urgentes, que implicarán a la Conselleria de Interior, serán efectivas en "tres o cuatro meses" en aras de que la gente de la calle "palpe" que se están haciendo cosas para restaurar la convivencia y cohesión social que solo "pocas personas" se niegan a respetar, ha lamentado el conseller. "La presencia policial es importante porque garantiza seguridad y tranquilidad; la gente necesita saber que si existe un delito se actúa y se lleva a la persona ante la Justicia", ha defendido Cleries.
El conseller ha justificado su ausencia de la manifestación de Salt contra la violencia de este sábado, y ha mostrado respeto hacia los presentes: "Personalmente creo que necesitamos calma, y reclamo a todos esta calma y voluntad de hacer las cosas con tranquilidad, teniendo en cuenta que existen personas indignadas autóctonas y extranjeras".
El plan anunciado, también en coordinación con la Delegación del Govern en Girona y abierto a entidades civiles, atacará con "contundencia" aspectos como la multirreincidencia de vándalos, las altas tasas de paro y fracaso escolar, con las consellerias de Justicia, Empresa y Ocupación y Enseñanza, además de la de Territorio y Sostenibilidad para planificar rediseños urbanísticos a largo plazo.
Debe ser "un plan de actuación concreto de todas las instituciones con la máxima colaboración institucional", que incluirá medidas preventivas para evitar nuevos incidentes como mayor presencia de educadores sociales en la calle. "Lo que debemos intentar con todos los medios es que esto no se repita en ningún otro sitio", ha aseverado el conseller que ha constatado que "hay ciertas personas y grupos que se quieren aprovechar de este tipo de situaciones".
En su discurso, ha exhibido su posición intermedia entre el "excesivo buenismo" para con los inmigrantes y la xenofobia instalada en algunos grupos, defendiendo la necesidad de que los inmigrantes gocen de sus derechos, pero que también cumplan con sus deberes. "No hay un nosotros y un vosotros, sino personas con derechos y deberes; y a menudo, se habla más de los derechos y debemos hacer pedagogía en este sentido".
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